José Fernández Mayato, Jefe del Cuerpo de Bomberos de La Habana

  El Cuerpo de Bomberos en Cuba fue fundado el 13 de noviembre de 1696 en Santa Clara, ciudad ubicada en la región central de la isla caribeña con fuerte presencia de inmigrantes canarios. Luego la institución fue extendiéndose a otras urbes, todas incipientes en esa etapa.

 A la hora de escribir la historia del Cuerpo tendría que registrarse el aporte de dos inmigrantes de Las Afortunadas. El coronel José Fernández Mayato, quien llegó a ser su jefe en La Habana, nació en la Orotava, Tenerife, en 1868. Según Ecured:

 "Ingresó el 9 de agosto de 1895 en el Ejército Libertador como soldado a las fuerzas del entonces Gral. Brig. Agustín Cebreco, en la región de Cambute. Participó en el apoyo al desembarco de la expedición del vapor Horsa, que tocó tierra por Cabañas, al oeste de Santiago de Cuba, el 15 de noviembre de 1895, bajo el mando de los generales Francisco Carrillo y José María Aguirre. Por esa acción fue ascendido a Sargento de primera.

 Posteriormente pasó a la Brig. de Cárdenas Primera Brigada, Primera División, Quinto Cuerpo (1a Brig. 1a Div. 5o Cpo.), en Matanzas, bajo las órdenes del entonces Coronel Carlos María Rojas.

 El 1 de diciembre de 1897 fue nombrado jefe del Regimiento de Infantería Cárdenas, de la misma Brigada, cargo en el cual terminó la guerra.

 Ascensos

Sargento de primera15 de noviembre de 1895;Tte., 5 de diciembre de 1895;Cp., 10 de diciembre de 1896;Cmdte., 1 de abril de 1897;Tte. Cor., 1 de diciembre de 1897.

Una de las varias heridas que recibió en combate le inutilizó el brazo izquierdo.Se licenció del Ejército Libertador el 1 de noviembre de 1899".





Ivestigando sobre su labor hemos encontrado un artículo del periodista Ciro Bianche lo siguiente: 

"El 5 de febrero de 1916 entraba en vigor la municipalización del servicio. Asumía la jefatura del Cuerpo el ingeniero Leopoldo Freyre de Andrade y se nombraba segundo a José Fernández Mayato, coronel del Ejército Libertador y sobreviviente del incendio de la ferretería de Isasi, donde perdieron la vida numerosos bomberos, el 17 de mayo de 1890: otra de las grandes tragedias que recuerda La Habana. La Alcaldía, por su parte, asumía en exclusiva el sostenimiento de los Bomberos, cuyos antecesores habían sido costeados por las compañías de seguro contra incendios, el mismo Ayuntamiento y la suscripción popular.

Fernández Mayato imprimió a la organización un sello de disciplina y honorabilidad, pese a ser blanco de venganzas y todo género de rivalidades. Fue una extensa campaña de insidias puesta en juego por los beneficiarios de la situación anterior con el fin de hacer fracasar el sistema implantado. Se movieron influencias, se acusó a la municipalización de inconstitucional ante el Tribunal Supremo, se sobornó a bomberos que devengaban salario para que renunciaran a su empleo… Fernández Mayato reprimió con mano dura la indisciplina y el Cuerpo de Bomberos de La Habana fue haciéndose más sólido y eficaz con la creación de nuevas brigadas conformadas por personal retribuido, y la compra y puesta en servicio de coches-cisterna, carros con escaleras y luz, transportes para jefes y oficiales y un camión de carga".Una historia con bomberos - Cuba Cultura

No fue  Fernández Mayato el único canario que desempeñó cargos importantes en el Cuerpo de Bomberos, pues también sobresalió Manuel de la Cruz Morera, Capitán, en Santiago de Cuba.





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